Implantología Estratégica
La implantología estratégica ha sido creada por el Dr. Stefan Ihde y cols. en la International Implant Foundation (IF), donde han desarrollado los dispositivos, el protocolo y sus disciplinas (quirúrgica, funcional y protésica) para rehabilitar con éxito a cualquier paciente en tres días, utilizando solo el hueso residual nativo disponible del paciente.
La implantología estratégica se diferencia de la implantología clásica convencional en el que el anclaje primario de los implantes se realiza en las segundas y terceras corticales, lo que habilita al profesional para realizar un tratamiento de carga inmediata con prótesis fija definitiva, colocando en este protocolo la rehabilitación definitiva en 3 días en comparación con de 3 a 18 meses.
Entre otras ventajas esta técnica permite rehabilitar a pacientes con poco o muy poco hueso disponible (atrofias severas), sin recurrir a injertos o aumentos óseos (elevaciones de seno), o evitando los implantes cigomáticos convencionales y sus prótesis híbridas. También pueden rehabilitarse pacientes con enfermedades sistémicas (diabéticos, anticoagulantes…etc), así como fumadores.
La Implantología Estratégica y sus técnicas
La técnica de implantología estratégica es mínimamente invasiva, por lo que el daño biológico realizado se reduce ostensiblemente, provocando mucho menos dolor e inflamación y requiriendo por lo tanto una menor medicación. En la mayoría de los casos los implantes se colocan transgingivalmente (con una perforación mínima sin abrir la encía), y no producen periimplantitis.
Esta técnica utiliza el hueso residual (basal), el que sobrevive a todo y está presente incluso después de muchos años desdentados en cualquier paciente. Este tipo de hueso no se reabsorbe a lo largo de la vida ya que es estructuralmente necesario. Por lo general no es el hueso alveolar creado durante la erupción de los dientes de leche y los dientes. Tenga en cuenta sin embargo, que el hueso crestal cortical se reabsorbe o se relocaliza durante el proceso de reabsorción que se llama atrofia.
Proceso de reabsorción ósea en el maxilar superior e inferior, obsérvese la disminución del hueso disponible.
Evolución del proceso de reabsorción ósea.
Otro aspecto de la implantología estratégica es la utilización de las áreas de hueso cortical para el anclaje de los implantes. El hueso cortical debe utilizarse para el anclaje del implante por buenas razones; los huesos tienen normalmente dos partes diferenciadas: una cortical externa (fuerte y altamente mineralizada) y una porción interna del hueso llamada “hueso esponjoso”. Mientras que las áreas óseas corticales son estructuralmente necesarias y siempre se reparan, las zonas óseas esponjosas no son necesarias (desde el punto de vista mecánico de los huesos) y llevan a la reabsorción.
- Una razón por la que el implantólogo debería utilizar preferentemente las corticales, es que los defectos corticales creados durante la cirugía de implantes siempre se reparan. Esto promueve/garantiza la integración de los implantes.
- Otra razón es, que el hueso cortical es muy resistente debido a su alta mineralización, lo que permite protocolos de carga inmediata.
Un ejemplo más para mostrar cómo se va curando y recuperando el hueso con STRATEGIC IMPLANT ® , independientemente de que los implantes hayan sido colocados en alveólos postextracción. Las superficies maquinadas de los implantes STRATEGIC IMPLANT ® no causan infecciones (mucositis, periimplantitis…. etc.).
Radiografía ortopanorámica de un caso atrófico de implantología estratégica donde puede observarse implantes multidireccionales, maximizando el aprovechamiento de la anatomía nativa del paciente, facultando para rehabilitar incluso las zonas distales.
Es un hecho que la implantología estratégica se haya introducido con éxito en nuestra profesión. Esta nueva tecnología faculta al profesional para realizar protocolos de carga inmediata, incluso en aquellos pacientes con grandes reabsorciones y que estaban desahuciados para recibir implantes, o a los que se les infligía un importante daño biológico con cirugías altamente invasivas (Injertos, aumentos óseos,…etc), que precisaban mucho tiempo y que con esta técnica se vuelven innecesarias ya que todos los pacientes proveen hueso basal para este protocolo.